miércoles, 28 de octubre de 2009

~La sombra del lobo~


Cuando el discípulo estaba acabando su instrucción y ya le quedaban pocos días para partir, el maestro le llamó a su presencia:

-Querido discípulo -le dijo- sé que me has soportado durante muchos años y que has aguantado estoicamente un entrenamiento duro y agotador. Eres el único que queda de los discípulos a los cuales saludé y recibí cuando llegastéis aquí. Sé que nunca he tenido una palabra de ánimo o aliento gratuita para tí. Por eso, voy a regalarte.algo que nadie conoce, una nueva técnica mortal, se llama "la sombra del lobo". Pero te la enseño sola y únicamente para que no la enseñes ni la difundas, quédatela sólo para tí y para cuando la necesites.
El discípulo aceptó e inmediatamente el maestro comenzó a enseñarle una técnica muy rara, extraordinariamente complicada, confusa y difícil. Tanto que, asustado, dijo al finalizar de verla:
-¡Para aprender ésa técnica tendría que estar aquí casi tantos años como los que he estado!
El maestro sonrió:
-Exacto, considera la posiblidad de quedarte para aprenderla, o de irte con lo que has aprendido. Como ves, ya apenas quedan discípulos de tu grado, tú serías el único avanzado que seguiría con mis enseñanzas, por lo que yo no tendría problema para enseñártela y dedicarte más tiempo. En tus manos queda. Solamente quiero que sepas que, si decides irte, no habrá vuelta atrás ni segundas oportunidades, y no podrás regresar de nuevo aquí.
El discípulo se quedó pensativo: ¿soportar de nuevo los exámenes del viejo gruñón que no admitía errores y sus pesados trabajos? ¿Agotar otros tantos años sin casi dormir y entrenando y trabajando para el monasterio a cambio de nada? ¡Si lo contara a sus familiares cuando regresara se reirían de él!
-No, mejor me quedo con lo aprendido, estoy bien así.
-Como quieras. -Aceptó el maestro, con una sonrisa. Y entonces parecía diferente, más simpático.
Pero, antes de marchar, ya en la puerta de salida, el discípulo se giró hacia el maestro:
-Me gustaría saber una última cosa, solo una: ¿por qué sonrió cuando le dije que me iba, si apenas lo hacía nunca mientras estuve aquí entrenando?
Cálida y tiernamente, el maestro tocó con su mano el hombro del joven:
-Querido amigo, porque cuando estabas con tus instructores y apenas te veía, cuando lo hacía para verificar tus avances en el arte marcial, tenía que hacerlo con gesto serio y autoritario, y era algo que me apenaba mucho, porque yo no soy así. Mas debía hacerlo para que tuvieras desde un principio la certeza de que mi arte y mis enseñanzas son serias. Sé que tengo fama de viejo cascarrabias y duro, fama que nunca me importó, aunque es injusta porque como sabes pocas personas se han relacionado conmigo. Ahora ibas a hacerlo tú, en un puesto avanzado y desde un lugar privilegiado, dedicándote todo mi tiempo. Y decidiste no continuar. Pero no te sientas mal, como ves, no hay nadie más de tu nivel por aquí, y eso es porque ninguno aceptó continuar con mis enseñanzas, todos eligieron lo mismo que tú cuando les hice tu misma prueba.
Se cerró la puerta detrás de él y el discípulo comenzó a caminar, alejándose del lugar, llorando y con una gran pena en su interior. No había conseguido saber lo que había ido a aprender. Ya podía regresar a su pueblo avergonzado, avergonzado por no tener la fuerza interior ni el valor para llevar su decisión de dominar el arte marcial y perseverar en sus enseñanzas.



- A veces estamos a un paso de querer conseguir nuestros propósitos y, sin saberlo, tiramos la toalla, nos volvemos atrás, y tenemos que volver a empezar. A veces los demás nos empujan a decisiones erróneas por no saber escucharnos a nosotros mismos. A veces tenemos que alejarnos algo de los problemas y las pruebas para verlas con auténtica perspectiva y para afrontar y encauzar una salida adecuada. -

sábado, 24 de octubre de 2009

Acá les dejo un vídeo que hice (modesta, muy modestamente) para un querido amigo, Federico Parducci. Él integra el duo folcklorico "La Diabla", de aquí de Mar del Plata, Argentina.
Esta canción, la cual me gusta mucho, se llama Oración del Remanso, de José Fandermole. Más abajo les pongo la letra de la misma para que la disfruten.



Oración del Remanso

Jorge Fandermole

Soy de la orilla brava,
Del agua turbia y la correntada
Que baja hermosa
por su barrosa profundidad,
Soy un paisano serio,
Soy gente del remanso Valerio,
Que es donde el cielo
Remonta vuelo en el Paraná.

Tengo el color del río
Y su misma voz en mi canto sigo
Del agua mansa
y su suave danza en el corazón,
Pero a veces oscura,
Va turbulenta en la ciega hondura
Y se hace brillo en este cuchillo de pescador.

Cristo de las redes
No nos abandones,
Y en los espineles
Déjanos tus dones.

No pienses que nos perdiste,
Que la pobreza nos pone tristes,
La sangre tensa y uno no piensa
Mas que en morir,
Agua del río viejo
Llévate pronto este llanto lejos
Que esta aclarando
Y vamos pescando para vivir.

Llevo mi sombra alerta
Sobre la escama del agua abierta
Y en el reposo vertiginoso
del espinel,
Sueño que alzo la proa
Y subo a la luna la canoa
Y allí descansa
Hecha un remanso
Mi propia piel.

Calma de mis dolores,
Ay Cristo de los pescadores,
Dile a mi amada
Que esta apenada esperándome,
Que ando pensando en ella
Mientras voy vadeando las estrellas,
Que el río esta bravo
Y estoy cansado para volver.

Cristo de las redes
No nos abandones,
Y en los espineles
Déjanos tus dones.
No pienses que nos perdiste,
Que la pobreza nos pone tristes,
La sangre tensa y uno no piensa
Mas que en morir,
Agua del río viejo
Llévate pronto este llanto lejos
Que esta aclarando
Y vamos pescando para vivir

(repite el último estribillo)


~♥GabiVero♥~

domingo, 18 de octubre de 2009

~♥Feliz Día Mamás Argentinas♥~


Sólo el amor de una madre


Sólo el amor de una Madre apoyará,
cuando todo el mundo deja de hacerlo.

Sólo el amor de una Madre confiará,
cuando nadie otro cree.

Sólo el amor de una Madre perdonará,
cuando ninguno otro entenderá.

Sólo el amor de una Madre honrará,

no importa en qué pruebas haz estado.

Sólo el amor de una Madre resistirá,
por cualquier tiempo de prueba.

No hay ningún otro amor terrenal,
más grande que el de una Madre.



Mi Mamá me Ama


El bacán sesentón piantó pal "shopping"
y compró pa' su vieja un buen regalo.
Lo garpó muy campante porque al toque,
firmó con su "Mont Blanc" un checonato.


Pensó un saludo pa' fletar de raje
directo al corazón, el de su madre,
minga de "fax", "e-mail" o de "internet"
sino por mano propia, vía sangre.

Esperaba el chamuyo de su cuore
pa' su tarjeta personal, bacana.
El Rolex de oro le morfó las horas,
y el mensaje filial se le negaba.


Rechiflado por la espera dijo "planto",
y compró: sacapuntas, blando lápiz,
y un cuadernito de colgar palotes,
cuadriculao, como en el tiempo de antes.

Con bastones ensayó la "m",
redondeles y ganchos pa' la "a"
y así temblando iluminó llorando,
la frase más papusa: "mi mamá".


Con escritura ingenua, la de antaño,
dio testimonio de su amor primero,

orando la plegaria candorosa
que encendía las hojas del cuaderno,

mi mamá me ama
mi mamá me ama
mi mamá me ama


Amuró el Faber, encendió un cigarro.
Peló su lapicera y satisfecho,
escribió con su letra ejecutiva:


Vieja, todo está igual,
no cambió nada:
Yo amo a mi mamá
y mi mamá me ama.

poema lunfardo de Roberto Peregrino Salcedo


Les quiero desear, antes que termine el día, muchas felicidades a todas las mamás de mi país, ya que hoy (3er.domingo de octubre) festejan su día.
Ser Mamá es lo más maravilloso que le puede pasar a una mujer.


~♥¡¡Feliz Día Mamitas!!♥~


~♥Gaby♥~

sábado, 17 de octubre de 2009

No existe un día más hermoso que el día de hoy


La suma de muchísimos ayeres forma mi pasado.
Mi pasado se compone de recuerdos alegres...
tristes...
Algunos están fotografiados y ahora son cartulinas
donde me veo pequeño, donde mis padres siguen
recién casados, donde mi ciudad parece otra.
El día de ayer pudo haber sido hermoso día...
Pero no puedo avanzar mirando constantemente
hacia atrás.
Corro el riesgo de no ver los rostros de los que
marchan a mi lado.
Acaso el día de mañana amanezca aún más
hermoso...
Pero no puede avanzar mirando sólo el horizonte.
Corro el riesgo de no ver el paisaje que se abre a
mi alrededor.
Por eso, yo prefiero el día de hoy. Me gusta pisarlo
con fuerza, gozar su sol o estremecerme con su frío,
sentir cómo cada instante me dice: ¡Presente!
Sé que es muy breve, que pornto pasará, que no voy
a poder modificarlo luego ni pasarlo en limpio...
Como tampoco puedo planificar demasiado el día de
mañana: es un lugar que todavía no existe.
Ayer, fuí, Mañana, seré. Hoy, soy.
Por eso, hoy te digo que te quiero...
hoy escucho...
hoy te pido disculpas por mis errores...
hoy te ayudo...
Porque hoy respiro, transpiro, veo, pienso, oigo,
sufro, huelo, lloro, trabajo, toco, río, amo...
Hoy,
Hoy estoy vivo.
Cómo tú.


Elsa I. Bornemann


lunes, 12 de octubre de 2009

Hoy


Hoy se que poco me importa:
el día que ayer partió
el día que mañana vendrá.

Hoy se que poco me importa:
qué he sido hasta ayer
qué seré de aquí en más

Hoy se que poco me importa:
todo lo que he tenido
todo lo que tendré

Hoy solo me importa:
que hoy te conocí,
que hoy eres mi vida,
que hoy eres mi ser,
que hoy eres todo
lo que quiero tener.


Iyad Ben Ahmed

domingo, 11 de octubre de 2009

Última carta del Dr. Favaloro...

"Si se lee mi carta de renuncia a la Cleveland Clinic, está claro que mi regreso a la Argentina (después de haber alcanzado un lugar destacado en la cirugía cardiovascular) se debió a mi eterno compromiso con mi patria.
Nunca perdí mis raíces. Volví para trabajar en docencia, investigación y asistencia médica. La primera etapa en el Sanatorio Güemes, demostró que inmediatamente organizamos la residencia en cardiología y cirugía cardiovascular, además de cursos de post grado a todos los niveles.
Le dimos importancia también a la investigación clínica en donde participaron la mayoría de los miembros de nuestro grupo. En lo asistencial exigimos de entrada un número de camas para los indigentes. Así, cientos de pacientes fueron operados sin cargo alguno. La mayoría de nuestros pacientes provenían de las obras sociales. El sanatorio tenía contrato con las más importantes de aquel entonces.
La relación con el sanatorio fue muy clara: los honorarios, provinieran de donde provinieran, eran de nosotros; la internación, del sanatorio (sin duda la mayor tajada).
Nosotros con los honorarios pagamos las residencias y las secretarias y nuestras entradas se distribuían entre los médicos proporcionalmente.
Nunca permití que se tocara un solo peso de los que no nos correspondía.
A pesar de que los directores aseguraban que no había "retornos", yo conocía que sí los había.
De vez en cuando, a pedido de su director, saludaba a los sindicalistas de turno, que agradecían nuestro trabajo.
Este era nuestro único contacto.
A mediados de la década del 70, comenzamos a organizar la Fundación.
Primero con la ayuda de la Sedra, creamos el departamento de investigación básica que tanta satisfacción nos ha dado y luego la construcción del Instituto de Cardiología y cirugía cardiovascular.
Cuando entró en funciones, redacté los 10 mandamientos que debían sostenerse a rajatabla, basados en el lineamiento ético que siempre me ha acompañado.
La calidad de nuestro trabajo, basado en la tecnología incorporada más la tarea de los profesionales seleccionados hizo que no nos faltara trabajo, pero debimos luchar continuamente con la corrupción imperante en la medicina (parte de la tremenda corrupción que ha contaminado a nuestro país en todos los niveles sin límites de ninguna naturaleza). Nos hemos negado sistemáticamente a quebrar los lineamientos éticos, como consecuencia, jamás dimos un solo peso de retorno.
Así, obras sociales de envergadura no mandaron ni mandan sus pacientes al Instituto.
¡Lo que tendría que narrar de las innumerables entrevistas con los sindicalistas de turno!
Manga de corruptos que viven a costa de los obreros y coimean fundamentalmente con el dinero de las obras sociales que corresponde a la atención médica.
Lo mismo ocurre con el Pami. Esto lo pueden certificar los médicos de mi país que para sobrevivir deben aceptar participar del sistema implementado a lo largo y ancho de todo el país.
Valga un solo ejemplo: el Pami tiene una vieja deuda con nosotros, (creo desde el año 94 o 95) de 1.900.000 pesos; la hubiéramos cobrado en 48 horas si hubiéramos aceptado los retornos que se nos pedían (como es lógico, no a mí directamente).
Si hubiéramos aceptado las condiciones imperantes por la corrupción del sistema (que se ha ido incrementando en estos últimos años) deberíamos tener 100 camas más. No daríamos abasto para atender toda la demanda.
El que quiera negar que todo esto es cierto que acepte que rija en la Argentina, el principio fundamental de la libre elección del médico, que terminaría con los acomodados de turno.
Lo mismo ocurre con los pacientes privados (incluyendo los de la medicina prepaga).
El médico que envía a estos pacientes por el famoso "ana-ana" sabe, espera recibir una jugosa participación del cirujano.
Hace muchísimos años debo escuchar aquello de que Favaloro no opera más!
¿De dónde proviene este infundio?

Muy simple: el paciente es estudiado. Conclusión, su cardiólogo le dice que debe ser operado. El paciente acepta y expresa sus deseos de que yo lo opere. "Pero cómo, usted no sabe que Favaloro no opera hace tiempo?". "Yo le voy a recomendar un cirujano de real valor, no se preocupe". ¡El cirujano "de real valor" además de su capacidad profesional retornará al cardiólogo mandante un 50% de los honorarios!
Varios de esos pacientes han venido a mi consulta no obstante las "indicaciones" de su cardiólogo. "¿Doctor, usted sigue operando?" y una vez más debo explicar que sí, que lo sigo haciendo con el mismo entusiasmo y responsabilidad de siempre.
Muchos de estos cardiólogos, son de prestigio nacional e internacional. Concurren a los Congresos del American College o de la American Heart y entonces sí, allí me brindan toda clase de felicitaciones y abrazos cada vez que debo exponer alguna "lecture" de significación.
Así ocurrió cuando la de Paul D. White lecture en Dallas, decenas de cardiólogos argentinos me abrazaron, algunos con lágrimas en los ojos.
Pero aquí, vuelven a insertarse en el "sistema" y el dinero es lo que más les interesa.
La corrupción ha alcanzado niveles que nunca pensé presenciar.
Instituciones de prestigio como el Instituto Cardiovascular Buenos Aires, con excelentes profesionales médicos, envían empleados bien entrenados que visitan a los médicos cardiólogos en sus consultorios. Allí les explican en detalles los mecanismos del retorno y los porcentajes que recibirán no solamente por la cirugía, los métodos de diagnóstico no invasivo (Holter, Eco, Cámara Gamma y etc., etc.) los cateterismos, las angioplastías, etc. etc., están incluidos.
No es la única institución. Médicos de la Fundación me han mostrado las hojas que les dejan con todo muy bien explicado. Llegado el caso, una vez el paciente operado, el mismo personal entrenado, visitará nuevamente al cardiólogo, explicará en detalle "la operación económica" y ¡entregará el "sobre" correspondiente!.
La situación actual de la Fundación es desesperante, millones de pesos a cobrar de tarea realizada, incluyendo pacientes de alto riesgo que no podemos rechazar.
Es fácil decir "no hay camas disponibles".
Nuestro juramento médico lo impide. Estos pacientes demandan un alto costo raramente reconocido por las obras sociales. A ello se agregan deudas por todos lados, las que corresponden a la construcción y equipamiento del ICYCC, los proveedores, la DGI, los bancos, los médicos con atrasos de varios meses. Todos nuestros proyectos tambalean y cada vez más todo se complica.
En Estados Unidos, las grandes instituciones médicas, pueden realizar su tarea asistencial, la docencia y la investigación por las donaciones que reciben. Las cinco facultades médicas más trascendentes reciben más de 100 millones de dólares cada una!
Aquí, ni soñando.
Realicé gestiones en el BID que nos ayudó en la etapa inicial y luego publicitó en varias de sus publicaciones a nuestro instituto como uno de sus logros!.
Envié cuatro cartas a Enrique Iglesias, solicitando ayuda (¡tiran tanto dinero por la borda en esta Latinoamérica!) todavía estoy esperando alguna respuesta. Maneja miles de millones de dólares, pero para una institución que ha entrenado centenares de médicos desparramados por nuestro país y toda Latinoamérica, no hay respuesta.
¿Cómo se mide el valor social de nuestra tarea docente?
Es indudable que ser honesto, en esta sociedad corrupta tiene su precio. A la corta o a la larga te lo hacen pagar.
La mayoría del tiempo me siento solo. En aquella carta de renuncia a la C. Clinic, le decía al Dr. Effen que sabía de antemano que iba a tener que luchar y le recordaba que Don Quijote era español!
Sin duda la lucha ha sido muy desigual.
El proyecto de la Fundación tambalea y empieza a resquebrajarse.
Hemos tenido varias reuniones, mis colaboradores más cercanos, algunos de ellos compañeros de lucha desde nuestro recordado Colegio Nacional de La Plata, me aconsejan que para salvar a la Fundación debemos incorporarnos al "sistema".
Sí al retorno, sí al "ana-ana".
"Pondremos gente a organizar todo". Hay "especialistas" que saben como hacerlo. "Debés dar un paso al costado. Aclararemos que vos no sabés nada, que no estás enterado". "Debés comprenderlo si querés salvar a la Fundación".
¡Quién va a creer que yo no estoy enterado!
En este momento y a esta edad terminar con los principios éticos que recibí de mis padres, mis maestros y profesores me resulta extremadamente difícil.
No puedo cambiar, prefiero desaparecer.
Joaquín V. González, escribió la lección de optimismo que se nos entregaba al recibirnos: "A mí no me ha derrotado nadie".
Yo no puedo decir lo mismo.
A mí me ha derrotado esta sociedad corrupta que todo lo controla. Estoy cansado de recibir homenajes y elogios al nivel internacional. Hace pocos días fui incluido en el grupo selecto de las "leyendas del milenio" en cirugía cardiovascular. El año pasado debí participar en varios países, desde Suecia a la India, escuchando siempre lo mismo. "¡La leyenda, la leyenda!"
Quizá el pecado capital que he cometido, aquí en mi país, fue expresar siempre en voz alta mis sentimientos, mis críticas, insisto, en esta sociedad del privilegio, donde unos pocos gozan hasta el hartazgo, mientras la mayoría vive en la miseria y la desesperación.
Todo esto no se perdona, por el contrario se castiga.
Me consuela el haber atendido a mis pacientes sin distinción de ninguna naturaleza.
Mis colaboradores saben de mi inclinación por los pobres, que viene de mis lejanos años en Jacinto Arauz.
Estoy cansado de luchar y luchar, galopando contra el viento como decía Don Ata.
No puedo cambiar. No ha sido una decisión fácil pero sí meditada. No se hable de debilidad o valentía.
El cirujano vive con la muerte, es su compañera inseparable, con ella me voy de la mano.
Sólo espero no se haga de este acto una comedia. Al periodismo le pido que tenga un poco de piedad.
Estoy tranquilo. Alguna vez en un acto académico en USA se me presentó como a un hombre bueno que sigue siendo un médico rural.
Perdónenme, pero creo, es cierto.
Espero que me recuerden así.
En estos días he mandado cartas desesperadas a entidades nacionales, provinciales, empresarios, sin recibir respuesta.
En la Fundación ha comenzado a actuar un comité de crisis con asesoramiento externo. Ayer empezaron a producirse las primeras cesantías. Algunos, pocos, han sido colaboradores fieles y dedicados.
El lunes no podría dar la cara.
A mi familia, en particular a mis queridos sobrinos, a mis colaboradores, a mis amigos, recuerden que llegué a los 77 años.
No aflojen, tienen la obligación de seguir luchando por lo menos hasta alcanzar la misma edad, que no es poco.
Una vez más reitero la obligación de cremarme inmediatamente sin perder tiempo y tirar mis cenizas en los montes cercanos a Jacinto Arauz, allá en La Pampa.
Queda terminantemente prohibido realizar ceremonias religiosas o civiles.
Un abrazo a todos..

René Favaloro, Julio 29-2000 -14,30 horas.



Un humilde homenaje a un grande...
Duele saber que con honestidad a veces no se logra lo que se desea, ni se puede ser feliz.
A pesar de haber hecho tanto por tantos seres desconocidos, por la humanidad misma!, él terminó triste y sólo, matando aquello que dió a tantos seres... su corazón..
Eso de verdad que duele.. duele mucho.