domingo, 27 de septiembre de 2009

5ª Entrega de Anécdota de los Santos...

Alfonso María de Ligorio


Podría decirse que este santo era un “águila del derecho”. Se dice que en ocho años trabajando como abogado, ¡NUNCA perdió un caso!
Durante ese tiempo, Alfonso disfrutó de la vida social y las diversiones de moda pero comenzó a olvidar su religión. Hasta que un día, en época de cuaresma, se retiró para pensar seriamente qué dirección debía tomar su vida. Alfonso decidió que no se casaría (aunque su padre siguió tratando de “concertar” un matrimonio para él) y que seguiría trabajando como abogado hasta que sucediera algo que le demostrara que Dios no quería que lo fuera. Algunos meses después… ¡SUCEDIÓ algo!
Durante un caso de la corte, Alfonso pronunció un discurso largo y vehemente, y estaba convencido de haber impresionado lo suficiente a todos como para que su cliente ganara. Pero en ese momento el abogado contrario le entregó un documento con un pasaje marcado y le dijo: “¡Desperdiciaste tu aliento! Omitiste la evidencia de la que depende todo el caso.” Alfonso había leído el documento antes, pero había pasado por alto lo más relevante. ¡No podía creer que hubiera hecho algo tan tonto! Debido a su error, perdió ese caso tan importante. Alfonso abandonó la corte y nunca más regresó.Él sintió que ésa era la señal que esperaba para abandonar su profesión de abogado y dedicarse a algo nuevo. Y lo hizo. Alfonso no sólo se convirtió en sacerdote, también se hizo célebre por sus numerosos escritos sobre temas religiosos y luego fundó una nueva orden religiosa, la de los Redentoristas. Hoy en día, los redentoristas están en todo el mundo: escriben, predican y hacen trabajo misionero, siguiendo el ejemplo de un “águila del derecho” a la que Dios envió a volar en un rumbo nuevo.


¿Te gustaría ser abogado algún día? ¿O preferirías ser un águila? Bien, probablemente no te crezcan alas, pero podrías ser piloto, trabajar en una línea aérea o sencillamente ¡realizar un viaje en avión! Entonces podrías mirar por la ventanilla y deleitarte con las maravillas que Dios creó: las nubes, el cielo, las aves ¡y TÚ!
¡TÚ eres el ejemplo más sorprendente de la creación! De todas las criaturas que hizo Dios, sólo las personas tienen la capacidad de pensar, elegir, ayudar, amar y reír. Usa tu cabeza en este momento, para pensar en otras cosas que creó Dios.
Veamos… peces y nueces, dinosaurios y canarios, plantas y planetas, patos y gatos, montes y montañas y millones de cosas más.
¿Por qué no intentas hacer una lista para ver hasta donde puedes llegar, enumerando las creaciones del Señor?
¡Y no olvides poner tu nombre al principio de la lista!

miércoles, 16 de septiembre de 2009

El fuego rojo...



El sabio pidió al discípulo: "Si quieres continuar en mis enseñanzas, tráeme el fuego rojo que arde con pequeñas y lentas llamaradas."
Al discípulo le agradó que le pidiera tal cosa: había, en las montañas que rodeaban el monasterio, oquedades de las que emanaban cualquier tipo de fuegos desde las profundidades de la Tierra: fuegos amarillos, fuegos rosas, fuegos verdes...
Hacía muchos años que estaba en aquélla escuela, preparándose, y no iba a fracasar después de todo lo aprendido: de las ciencias del Universo y de la Tierra que ya conocía.
Tomó su mochila y comenzó a buscar.
Escaló rocas cada vez más altas, exploró grutas cada vez más oscuras y profundas, y encontraba fuegos de todo tipo: rojo con grandes llamas, rojo con ondulantes haces, rojo con llamas multicolor... pero rojo, y con pequeñas y lentas llamas...
Pasaron los días y las semanas.
En sus ojos sólo veía fuegos, pero no el fuego que buscaba.
Al fin, cansado y con la ropa destrozada, volvió al monasterio.
Relató que lo había intentado, incluso le había traído brasas de otros tipos de fuegos más hermosos que el que le habían pedido.
El sabio se levantó de su asiento y caminó por la estancia, en cuyas paredes, iluminadas por letras y pequeñas llamas de fuegos rojos había esculturas de antiguos guerreros.
Se detuvo ante uno de los recipientes con aquél carbón.
Miró al discípulo. -Aprendamos a ver lo que tenemos delante de los ojos. Aprendamos a percibir lo que está oculto desde siempre para nosotros, simplemente, porque no queremos verlo.-


viernes, 11 de septiembre de 2009

Vídeo con frases y música japonesa.


Lo hice para felicitar y darle las gracias, en este día del Maestro, a una persona especial para mi y que cambió mi vida... Mario, mi marido y mi profesor de Karate-Do...
Gracias!.. siempre te voy a dar las gracias por estar conmigo. TQM!!




viernes, 4 de septiembre de 2009

¿Dónde están tus muebles?


Se cuenta que en el siglo pasado, un turista americano fue a la ciudad de El Cairo, en Egipto, a visitar a un famoso sabio. El turista se sorprendió al ver que el sabio vivía en un cuartito muy simple y lleno de libros. Las únicas piezas de mobiliario eran una cama, una mesa y un banco. “¿Dónde están sus muebles?” –preguntó el turista-. Y el sabio rápidamente le retrucó: “¿Y dónde están los suyos?” “¿Los míos?” –se sorprendió el turista- , “pero si yo estoy aquí solamente de paso”. “Yo también…”- concluyó el sabio.

Moraleja: La vida en la tierra es solamente temporal. Sin embargo, algunos viven como si fueran a quedarse aquí eternamente y se olvidan de ser felices. El valor de las cosas no está en el tiempo que duran, sino en la intensidad con que suceden. Por eso existen momentos inolvidables, cosas inexplicables y personas incomparables.